¿Por qué debería incubar mi proyecto?
Lanzarse con un proyecto puede resultar abrumador. Ponerlo en marcha y darle forma es un trabajo duro que requiere mucho tiempo y esfuerzo. Debido a esto, una buena oportunidad para que esta tarea sea más sencilla es acudir a una incubadora de empresas. Estas buscan startups que tengan oportunidad de crecimiento y un potencial de impacto.
El objetivo de una incubadora de empresas es acelerar el crecimiento y asegurar el éxito de proyectos emprendedores. Para ello, utilizará una amplia gama de recursos y servicios empresariales (como facilitar espacios físicos, capitalización, coaching, networking, etc.). Se trata, por tanto, de un centro de apoyo que ofrece asesorías especializadas para que tu idea de negocio evolucione hasta ser una empresa formal. Una incubadora que está funcionando actualmente es Madrid Food Innovation Hub. El centro ha puesto en marcha el primer programa de incubación para proyectos Horeca de la capital. Durará doce semanas y está centrado en la innovación. Su meta es encontrar nuevos conceptos gastronómicos, nuevos modelos de negocio o herramientas y proyectos que sumen al sector actual.
Aquí tienes varios motivos por los que deberías considerar la incubación como una opción para desarrollar tu proyecto.
Fuente de información
Las incubadoras son como bibliotecas que guardan información muy valiosa. Cuenta con un equipo formado por expertos que te ayudarán a resolver los inconvenientes que aparezcan por el camino. Además, están conectados con inversores, minoristas y otras organizaciones del mismo ámbito que tu proyecto y que buscan nuevos conceptos. La creatividad y la innovación están a la orden del día, con ideas que son intercambiadas continuamente.
Contactar con personas relevantes
Contar con una red de contactos amplia y adecuada es esencial para que tu startup despegue. Si bien las incubadoras brindan servicios internos a las empresas emergentes, también ofrecen experiencia y capacitación de fuentes externas que pueden ayudar a derribar diversas barreras. Conocerás a personas que, a su vez, te presentarán a otras.
Vías de financiación
Encontrar financiación puede ser uno de los mayores desafíos para una startup y, sin ella, no llegarás a ningún sitio. Las incubadoras pueden ahorrarte tiempo y dinero al conectarte con los inversores adecuados. Además, muchas incubadoras invierten ellas mismas en empresas emergentes.
Campo de pruebas
Antes de que una idea inicial llegue al mercado, un paso importante es comprobar que sea viable y escalable como negocio. Las incubadoras se encargan de monitorear cómo las startups planean abordar las necesidades del cliente y les brindan retroalimentación para mejorar. Es decir, hasta que el proyecto no tenga valor real fuera de la incubadora, no es recomendable que esté disponible para el gran público. También hay que comprobar que no contiene errores y solucionar los problemas que puedan surgir.
Crecer más rápido
Las incubadoras aumentan la probabilidad de éxito de la puesta en marcha de una empresa emergente. La tasa de supervivencia (cinco años, al menos) de las startups que participaron en programas de incubación se estimó en un 75-87 %.
Después de conocer estas ayudas que ofrecen las incubadoras, ¿estás preparado para inscribir a tu startup en un programa de incubación?